lunes, 12 de enero de 2009

En Batavia



María Antonieta Hagenaar, madre de la única hija de Pablo


Neruda llegó a Batavia, donde sí había consulado. Se presentó allí y se encontró con un hombre colérico que había sufrido una estafa de Mansilla. Había sido engañado, quedándose en Batavia para hacer las funciones del supuesto cónsul Mansilla, y enviarle el dinero de los beneficios.

Pablo decidió entonces enviar un telegrama al Gobierno de Chile, pidió “Ink” (tinta, en inglés) al personal del hotel donde se hospedaba, pero no le entendían. Al final, mostrándoles un tintero de una habitación vecina, entendieron a Pablo diciendo en voz alta “¡Tinta!”, que coincidía en malayo con la palabra en español. Gracias al telegrama, Neruda recuperó su puesto de cónsul, aunque ganando poco dinero. En el hotel comía ricos y abundantes platos, que saciaban la glotonería del poeta.

Un día, ya establecido Neruda en un piso, la mangosta se escapó, y al ser prácticamente el único lazo que unía a Brampy y a Pablo, Brampy regresó a Ceilán dejando a Pablo solo. En ese piso, a pesar de ser pequeño, sobraba espacio, por lo que el poeta contrató a una cocinera y a otro boy, ambos javaneses.

En esa época había conocido a una joven llamada María Antonieta Hagenaar (la que se convertiría en su primera esposa el 6 de diciembre de 1930, y madre de su única hija), una criolla holandesa con algo de sangre malaya, y pensó en casarse con ella. También contó por esos tiempos con la compañía de un cónsul cubano y su mujer, de los que se hizo amigo, y de un cónsul alemán judío, llamado Hertz, que creía imposible que Hitler llegara alguna vez al poder.

3 comentarios:

Anto Piantieri dijo...

¿¿¿¿Qué es Batavia ????

Anto Piantieri dijo...

¿?¿?¿?¿¿¿?e¿?¿?¿¿¿?¿?

Sisebuto dijo...

Batavia es el nombre con el que se conoció hasta 1942 a la actual capital de Indonesia, Yakarta, ubicada en la isla de Java.